J3 – Sanitas vs Marsh

Los locales sellaron su pase como primeros de grupo de la Champions de las Empresas gracias a un inspirado Jaime Fraile, que anotó dos tantos y firmó un partido sensacional, aunque no sin sufrir. El guardameta de Marsh sostuvo a los suyos con un repertorio de paradas salvadoras, pero nada pudo hacer ante el acoso de un Sanitas que mereció el triunfo.

Quien la sigue la consigue. Sanitas y, en concreto, Jaime Fraile se debieron ir con una sensación parecida del municipal de Valdeyeros, en lo que fue el triunfo de la confirmación; la de la superioridad en el terreno de juego y la matemática que significa la clasificación como líder de grupo en la Champions de las Empresas. Pero no fue fácil, principalmente porque Marsh salió con decisión a un partido complicado por las condiciones meteorológicas. El frío, la lluvia y el viento dificultaron el juego y, pese a ello, los visitantes avisaron con una ocasión clarísima en los primeros compases de Jesús García, que en una contra enviaba el balón ligeramente por encima del larguero. Sanitas respondió inmediatamente con un disparo desde la frontal de Jaime Fraile que también se marchó por poco.

El ritmo fue progresivamente en aumento, una vez que los jugadores iban entonándose. En Marsh, la entrada de Guillermo Iglesias fue clave para que estos se asentaran con buena circulación y el buen posicionamiento. La conexión Guillermo – Miguel Ignat brindaron a los visitantes los mejores minutos del partido. En un saque de banda, el propio Iglesias desnudó a la zaga rival plantándose solo ante Alberto Moset y definiendo con clase para poner el 0-1.

A partir del gol de Marsh, todo se puso cuesta arriba para un Sanitas que mostró algo de desesperación. De hecho, el líder de la zaga, Andreu Garcia, tuvo que asumir la responsabilidad con alguna excursión al ataque ante la falta de desmarques y de fluidez en la parcela ofensiva. Rodrigo Fernández no acabó de encontrarse cómodo y evidenció con alguna que otra pérdida poco habitual la falta de precisión.

Ya en la segunda mitad, Sanitas salió mejor y poco a poco el dominio local fue creciendo, hasta el punto de que Rodrigo Iglesias tuvo que ejercer de salvador. El propio Jaime se rindió ante el guardameta en un disparo al segundo palo con toda la intención y que el arquero consiguió desviar con una estirada espectacular. Tampoco Rubén Domenech, que cuajó un buen partido, pudo superar a Rodrigo en su disparo raso que obligó al portero a emplearse con una intervención a contrapié.

Marsh, agazapado en su área, intentaba con alguna salida a la contra sorprender, pero el control del balón era total por parte de los locales, que imprimieron una marcha más y encontraron con el gol de Jaime Fraile la dosis de oxígeno necesaria para encarar los últimos minutos. El extremo, tras haberlo intentado por todos los medios, consiguió batir con el interior y con un tiro cruzado al impenetrable Rodrigo. El equipo creció, pero con la diferencia de que ahora sí aparecían los huecos, tal vez por la tranquilidad con la que Sanitas manejaba la posesión. A falta de 8 minutos para el final, Diego Domenech empujó un balón que se paseaba sin dueño por el interior del área para dar la vuelta al marcador y ya en la última acción del partido, Jaime Fraile, con un recorte espectacular, dejó sentado a Rodrigo Iglesias para poner el 3-1 definitivo y completar una actuación individual sensacional.