J8 – Mercury vs CNC

La noche más inspirada de Óscar Díez y Emilio Miranda, autores de un doblete cada uno, supuso un grandísimo paso al frente para que Mercury estrenase su casillero de puntos en la Liga Apertura. Los ingenieros acabaron con su dinámica a lo grande, sumando de tres después de superar con holgura a un CNC que desperdició una oportunidad de oro de escaparse de un rival directo.

Sonríe al fin de alivio un Mercury al que se le había resistido la victoria durante las primeras siete jornadas de campeonato. Este martes, frente a CNC, fue la vencida para ellos y con grandísimas sensaciones más allá del resultado final de 4-1. Los azules huyen así de la cola de la clasificación del grupo 6, donde solamente queda Mazars sin puntuar, en volandas de un Óscar Díez letal en el área y de un Emilio Miranda que solo sabe marcar golazos. El tanto de Álvaro Navas había metido de lleno a los blancos en la lucha por puntos durante la primera mitad, aunque quedó en una mera anécdota al término del tiempo reglamentario.

El gran peso de presentarse a la cita con un ‘rosco’ en puntuación incentivó a Mercury a ejecutar una puesta en escena descarada, sin miedo a atreverse ante un rival que se vio sobrepasado en intensidad en los primeros compases. Todas las ocasiones de los primeros minutos tuvieron a José Carlos Avendaño en el punto de mira, aunque el guardameta respondió con creces dejando un buen repertorio de estiradas. Bajo el frío intenso de la noche madrileña, el arquero entró en calor antes que muchos jugadores de campo, aunque los azules terminaron destrozando la puerta del gol de tanto llamar a ella. Óscar Díez anotó el 1-0 en una segunda jugada nacida de un saque de banda, dando la primera muestra de su instinto cazagoles.

Sin embargo, la falta de experiencia en el manejo de estas situaciones hizo que Mercury echase a perder su ventaja muy rápido. Solo tres minutos después, Álvaro Navas devolvió la igualada tras una imparable galopada por el costado zurdo, aunque no fue suficiente para apagar la llama de ilusión de unos locales especialmente entonados. Empeñados en que esta fuera al fin su gran noche, los ingenieros volvieron a la carga al minuto siguiente con eficacia y mucho desparpajo, el mismo que llevó a Alexandre Sueiro a bailar en el área antes de asistir a un Emilio Miranda que puso el colofón al 2-1 con una definición superlativa de espuela.

Manteniendo sus emociones ya bajo control, Mercury fue capaz de controlar a un CNC carente de ideas para hacerles daño. Esta vez, la renta mínima no solo traspasó la línea del tiempo de descanso, sino que en los primeros minutos de la reanudación Óscar Díaz demostró que la reivindicación del colista iba muy en serio. De nuevo con Alexandre Sueiro como surtidor de asistencias desde la banda derecha, el ’11’ firmó su doblete apareciendo en el segundo palo para empujar la pelota a puerta vacía.

La doble ventaja dejó a CNC muy tocado, presa reincidente en un entramado defensivo local reforzado con el marcador ya decantado. Jugadas a balón parado, propicias para realizar envíos directos al área, fueron la fórmula más buscada para inquietar a un Carlos Santiago Sánchez que derrochó seguridad bajo palos. Mientras el intento de remontada blanca quedaba a todas luces fallido, Mercury se sumió en una fiesta total cuando Emilio Miranda convirtió el definitivo 4-1 con una sublime rosca desde fuera del área teledirigida a la mismísima escuadra.