J9 – Equinix vs IATA

Los visitantes tiraron de orgullo en la segunda mitad para intentar levantar un 2-5 en contra, pero se quedaron a las puertas. Los tres goles de Álvaro García sirvieron de colchón local para llevarse los tres primeros puntos en esta Liga Clausura, insuficientes aun así como para escapar del pozo de la clasificación del grupo 4.

La jornada del grupo 4 de Liga Clausura tenía entre sus citas un duelo de urgencias en la zona baja. El más necesitado, sin duda, era Iata, que se presentaba como colista y con el casillero de puntos a 0 tras 8 fechas disputadas. Por su parte, Equinix ocupaba la penúltima plaza con 9 puntos y un triunfo le serviría para instalarse a la parte media de la clasificación a última hora.

A las 21:00, ya anocheciendo, el colegiado daba la señal para que rodara la pelota en Santa Ana. Desde los primeros compases, ambos demostraron que su situación en la tabla no impediría ver un partido vistoso y alegre. Ya en el minuto 2, se celebró el primer gol en el bando visitante: Álvaro García recibió un pase magnífico de Carlos Estévez y, desde la derecha del área, la cruzó para el 0-1.  La contienda comenzaba bien para los colistas, que lejos de conformarse, buscaban el segundo con una muy buena circulación de balón.

Iata se hacía cada vez más con el control del duelo. Sin embargo, en el primer acercamiento, los rojos lucieron pegada. En el 9’, Jorge Gesteira se inventó un pase de tacón entre líneas sublime para habilitar a Ángel Cámara, quien definió a un costado en el mano a mano. El empate fue un respiro para los locales, que se veían superados por su rival hasta entonces. A pesar de encajar el 1-1, los azules tiraron de personalidad para seguir con las mismas ideas cocinando el segundo y, de este modo, llegaron los minutos decisivos en el choque. Tres zarpazos seguidos decidieron mucho: en el 13’, Diego García puso el 1-2 con un tiro lejano que rebotó en un rival y se coló en la red; apenas un minuto después, Raúl Quero tocó lo justo un envío largo al área para empujar la pelota y hacer el tercero; los dos goles desconectaron a Equinix y el crack de la noche, Álvaro García, aprovecharía para dar la estocada al contrataque.

En apenas unos instantes, los rojos habían perdido muchas opciones de llevarse el encuentro y las sensaciones colectivas no eran nada buenas. Fue aquí cuando apareció de nuevo Jorge Gesteira, con una jugada individual impresionante en la que regateó a varios rivales y terminó en un derribo en el área. Él mismo se encargaría de ejecutar el penalti para poner el 2-4 en el 23’. Sin embargo, la esperanza duró poco. Al filo del descanso, Álvaro García se perfiló con la pelota en la derecha y, con un latigazo raso, puso la ‘manita’.

Visto el primero, el segundo tiempo apuntaba a una goleada azul, pero, la sensación desde el principio fue muy distinta. Los visitantes parecían salir a especular con el resultado, sin apretar arriba. Esto dio la oportunidad a los locales de crecer poco a poco, aunque no fue hasta el minuto 33 cuando se metieron en el partido. Un robo de balón propició una contra que terminó con una buena definición de Alfredo Semprún ante Francisco Bataglia.

Pese al 3-5, lo cierto es que el duelo no peligraba demasiado para un Iata que seguía sin proponer ofensivamente, pero que se mostraba sólido atrás. Fue en la recta final cuando Equinix tiró de orgullo y asumió riesgos para apretar en ataque. Primero avisó y, poco después, un error de Diego García le dio emoción a los últimos compases. Éste vio la segunda amarilla por interrumpir el saque de una falta y dejó a los suyos con seis. En superioridad numérica, los rojos se volcaron en ataque, aunque la alerta de la expulsión hizo que su rival cerrara filas y achicara de todas las formas posibles. Así, el cuarto gol local no llegó hasta el 49’, cuando Ángel Cámara enganchó la pelota en la frontal con la puntera, despistando así a Francisco Battaglia. El tanto permitió darle algo de vida a los últimos segundos de la contienda, pero no fue suficiente para alcanzar la igualada.