J9 – Cetelem vs Devoteam

El cuadro financiero acudió a la última jornada del grupo 9 de la Liga Apertura dependiendo de sí mismo para concluir como líder, pero tropezó estrepitosamente ante un Devoteam que se convirtió en la gran revelación del miércoles. Inmersos en la zona media, los consultores tecnológicos se llevaron los últimos tres puntos en juego por la mínima gracias a un último tanto de Luis Gómez decisivo para desequilibrar la balanza.

La gesta de Devoteam puso patas arriba el grupo 9 liguero. Su triunfo en Alameda de Osuna ante un Cetelem con todo a favor para encabezar la clasificación definitiva dio un vuelco a la competición justo antes de las eliminatorias. Y es que el cuadro consultor se presentó de dulce, encantado de superar las pruebas que les presentaron un constante ‘más difícil todavía’. Incluso iniciando con solo cinco efectivos, los rojillos se llevaron un igualadísimo pulso en el que la iniciativa en el marcador siempre fue suya. Luis Gómez asestó el golpe definitivo con el 2-3 y, aunque Raúl Moure tuvo la sentencia del cuarto desde el punto de penalti, tocó sufrir hasta el final para concretar la machada.

Ni siquiera extendiendo el margen horario para iniciar el partido fue capaz Devoteam de reunir una alineación completa en tiempo y forma. Cetelem, ante cinco jugadores, dispuso de una oportunidad inmejorable para haber abierto brecha en el marcador muy pronto, pero su ímpetu careció de la precisión deseada. Pese a las complejidades de este escenario, los rojillos dieron la cara con creces e incluso en inferioridad Alberto Garzón se permitió dar algún que otro susto al arco rival con rápidos contraataques.

Se diluyó el ataque de Cetelem intentando conectar con un Fran Martín omnipresente, deseoso de ser protagonista una vez más, pero muy bien encimado en todo momento. Mientras los verdes lamentaban su inicial ‘quiero y no puedo’, Devoteam dio un paso al frente cuando consiguió reclutar hombres incluso para disponer de banquillo. Además, los visitantes pudieron congratularse de haber dado en el clavo con sus recientes incorporaciones en el mercado invernal. Si Raúl Moure fue un incordio constante para los defensores locales como punta de lanza, el trabajo de Luis Gómez pegado a la banda tampoco pasó desapercibido. Sin embargo, quien volvió a llevarse los focos en el 0-1 fue un Alberto Garzón letal a la carrera y con pulmones suficientes para definir con una sutil vaselina.

Este gol cayó como un bombazo en mitad de la jornada. Contra todo pronóstico, Cetelem se vio obligado a remontar para evitar un resbalón digno de recordar. El miedo, no obstante, amainó cuando Carlos Rubio igualó tras una jugada de estrategia perfecta. Pero estaba claro que no iba a ser una noche tranquila para la plantilla financiera y Jesús Montejo se encargó de activar de nuevo sus alarmas convirtiendo el 1-2 de penalti.  Estos fueron los instantes de mayor locura a pie de césped, por lo que los verdes tuvieron que recurrir nuevamente al balón parado para reintentar su volteo al resultado. Y Cetelem siguió sacando partido de su pizarra, obteniendo una valiosísima bombona de oxígeno cuando Javier González embocó el 2-2 aprovechando un barullo en el área tras un saque de banda colgado al área.

Con una especie de ‘calma tensa’ se llegó al tiempo de descanso. Un solo gol era capaz de jugar un papel fundamental en el devenir del torneo dependiendo de en qué portería entrase, como acabó sucediendo después. Acababa de rebasarse la media hora de disputa cuando Luis Gómez redondeó su magnífico estreno coronando el 2-3 de Devoteam, haciendo gala de una facilidad pasmosa para armar contragolpes.

La presión se apoderó de un Cetelem incapaz de encontrar su mejor versión en el momento más inoportuno. Ni los driblings constantes de Fran Martín desembocaban en remates desde posiciones claras, ni la cabeza de Alejandro Alonso estuvo precisa actuando como arma principal en balones aéreos. Para colmo, Devoteam pudo haber finiquitado su triunfo encarando otra pena máxima, pero Raúl Moure se topó con una intervención soberbia bajo palos. Los financieros consiguieron una vida extra para los compases decisivos, pero no bastó para impedir la caída que dejó vía libre a Savills para conquistar la cabeza de la tabla ‘in extremis’.