J4 – Redpiso vs Aurea Capital

Ambos equipos nos regalaron un fantástico partido lleno de goles y emoción en el que Redpiso comenzó adelantándose en dos ocasiones, Aurea Capital lo remontó y, en la recta final, los locales volvieron a meterse en la lucha por los puntos.

El festival de goles arrancó temprano, y es que nada más empezar el choque, en el primer minuto de juego, Redpiso iba a disponer de la ocasión que daba el pistoletazo de salida a la montaña rusa de Trivema Park, obteniendo la puntería suficiente para golpear primero en el luminoso. David Pérez recogió el cuero en el área de castigo y disparó directamente al fondo de las mallas para augurar, a priori, un partido negro de los visitantes.

Las cosas no iban a mejorar con el paso de los minutos, y una vez superada la fase de tanteo en la que Aurea Capital se había puesto por debajo, vieron como Álvaro Chousa doblaba la distancia en el marcador en favor de los rojillos, aprovechando el regalo que le había llovido del cielo de la zaga y portería visitante. El calvario foráneo era una realidad y, con tan pocos minutos disputados, todo hacía indicar que Redpiso tenía preparada la alfombra roja para desfilar por ella, aunque la realidad fue bien distinta.

Los azulones decidieron sacar el orgullo y la casta que tienen dentro, y gracias a eso, sumado a la calidad del “10”, lograron picar piedra para terminar cavando un túnel que les llevó a recortar distancias en el marcador. Pese a haber dispuesto de alguna llegada en juego posicional, el primer gol llegó tras un córner a favor de los locales, quienes no acertaron a rematar y dieron rienda suelta a Aurea Capital para montar el contraataque, y claro, ahí recibió Matthieu Arviset, que cargó la pierna mientras dejaba caer el esférico y, con el exterior, la mandó a guardar para recortar distancias. Ahora sí había duelo de nuevo, y más cuando a los pocos minutos, de nuevo Arviset, logró mandar a la red un balón colgado desde la izquierda para colocar el empate a dos.

Esto no fue todo en el primer acto, ya que el choque nos guardó una última sorpresa de color azul. El 10 visitante se dirigió al rincón de la bandera para poner el cuero en movimiento, con la precisión necesaria para que llegara a Iyán Fernández que puso por delante a los suyos y culminaba la remontada antes del entretiempo.

Ya en la segunda mitad, el partido entró, en los primeros minutos, en un ida y vuelta constante en el que nadie lograba ponerle pausa al juego, pero tampoco perforar la portería rival para obtener premio al toma y daca que se estaba produciendo, hasta que Marcos Arnaiz logró el cuarto de los suyos con una acción similar a los dos primeros tantos de sus oponentes, un balón suelto y un cazador rondando la portería, no hicieron falta más elementos. Y ahí estábamos, presenciando algo increíble, del 2-0 inicial al 2-4 en un tramo de buen juego de Aurea Capital.

El cuarto gol supuso un antes y un después en Redpiso, y es que tras el gol, sin nada que perder, se soltaron en ataque y empezaron a encerrar al elenco rival, llegando a la portería mediante juego de posición, contragolpes, balón parado… daba igual el cómo, solo importaba el qué. Y así, a base de insistir en la recta final de la porfía, llegó el tanto de la esperanza. Enrique Sousa creyó más que nadie para luchar por un balón que la zaga azulona tenía controlado, consiguió robar y encarar solo la portería defendida en ese momento por Matthieu Arviset, para acabar finalizando una acción de coraje en gol. Y cuando tan solo habían pasado dos minutos, David Pérez marcaba su doblete y el tanto que hacia realidad una nueva remontada en el luminoso. Ver para creer, pero al final, el marcador no volvió a moverse y el reparto de puntos reflejó la igualdad vista sobre el terreno de juego, dejando un punto para cada escuadra.